martes, 23 de febrero de 2010

Sí, el regreso del blog!




Mis queridos lectores (que tal vez no sean muchos pero sí fieles...).
A mediados de octubre, hice un viaje de cinco semanas a Argentina acompañada de mi novio (primera vez que visitaba nuestro país...experiencia que da en sí misma para un blog totalmente nuevo...) y al volver a la isla, me encontré con un difícil período de adaptación. Les contaré en detalle las razones del mismo y cómo lo fui superando en mi próxima entrega, pero quería avisarles que el blog sigue vivo, si bien estuvo dormido por algunos meses.
Actualmente estoy por unos pocos días nuevamente en Argentina tomando una dosis de energía porteña, ya que necesitaba el contacto y amor de mi querida gente, la buena onda, bailar tango y, por qué no decirlo, disfrutar unos Havana y ver algún partido de Boquita (aunque no esté en su mejor momento...) sin la presencia británica, ya que el tema de tener que estar traduciéndole todo el tiempo las conversaciones o que mis amigos tengan que estar hablando constantemente en inglés es un embole... Además, hay cosas que nunca tienen la traducción justa o explicarlas lleva un siglo. ¿Como uno traduce sin perder la esencia, alguna de esas finas y elegantes frases populares, poéticas metáforas o elaboradas rimas nacidas del ingenio vernáculo?
Ejemplo 1: El que se quema con leche, mira una vaca y llora (ésta la he usado en inglés con una traducción algo así como "Those who burn their tongue with milk, they cry when seeing a cow..." o algo así...)
Ejemplo 2: El que se acuesta con chicos, amanece meado ...
Ejemplo 3: Es al pedo re-empujar, cuando la poronga es corta...
(Se aceptan comentarios con propuestas de traducciones...)

En fin. Era más fácil venir sola y no perder tiempo en traducciones precarias.
En unos pocos días, tendrán la siguiente entrega donde les contaré cómo fue mi encuentro con la isla allá a fines de noviembre del 2009, tras vivir nuevamente 5 semanas en Argentina, pero de vacaciones.
Van acá unas fotitos, esta vez no de Grand Turk, sino de nuestra breve estadía por aquí.